Literature
Una noche lluviosa.
Era un día lluvioso cuando noté que no había traído mi paraguas, ¡qué tonta fui en olvidármelo! Además, me encontraba parada completamente sola por debajo de un pequeño cartel que amortiguaba las gotas de lluvia y no sabía si irme corriendo hacia mi casa o esperar a que parara de llover. Mi celular no tenía batería, por lo tanto, no podía llamar a nadie para pedirle que me viniera a buscar. Pero lo peor de todo, literalmente, lo PEOR, era que necesitaba llegar al concierto que daría Francis en el bar que se encontraba a unas calles de donde me encontraba. No quería de